Viviendo en el siglo XXI hay una cosa que tenemos muy clara y es que las tecnologías avanzan cada vez a una mayor velocidad y que como si nada entran en nuestro día a día para ayudarnos y mejorar nuestras condiciones y bienestar tanto personal como social.
Así lo podemos comprobar con algunas aplicaciones, como por ejemplo Whatsapp, que en apenas unos años ha evolucionado desde la nada hasta el punto en el que una gran parte de la población lo utiliza como aplicación principal de comunicación por encima incluso de las típicas llamadas de voz de toda la vida.
Pues lo mismo está pasando en todo el resto de sectores que te puedas imaginar, desde la moda, la televisión o la seguridad, en la que nos centraremos en este artículo, concretamente, en la seguridad de nuestras casas. Y es que es fascinante como las nuevas tecnologías están entrando poco a poco en nuestros hogares y convirtiendo nuestras viviendas en lo que podríamos llamar un “robot de cocina de tamaño industrial”.
Nuevos elementos de seguridad
A continuación nombraremos algunos de estos nuevos elementos de seguridad, que protegerán nuestras casas y comercios de maneras más eficientes. Como son, las cerraduras electrónicas que se abren por código, reconocimiento dactilar o incluso facial, cerraduras invisibles que se abren con mando a distancia y cuyo mecanismo se encuentra en el interior, lo que no deja opción a la manipulación.
Sistemas de seguridad con niebla o humo, que impiden el robo llenando el espacio de una densa niebla que impide a los intrusos ver y desplazarse con normalidad, lo que no solo impide el robo sino también la huida de estos.
Sistemas de movimiento, como las cámaras de visión panorámica y nocturna, que permiten una visión de cualquier ángulo incluso por la noche; cámaras de tiempo real; detectores de movimiento o incluso sistemas que regulan de forma autónoma la iluminación de nuestro hogar, lo que permite simular que estamos en casa. Además, todos estos sistemas cada vez están más integrados con conexiones Wifi que los permiten conectarse con nuestros Smartphones dejándonos plena libertad de personalización, así como de vigilancia en cualquier momento y lugar.
Existen ya incluso las cerraduras inteligentes, que permiten el acceso a la vivienda sin el uso de llaves, tan solo hay que acercar el Smartphone a la puerta y esta se abrirá mediante la conexión Bluetooth o también los timbres inteligentes, que permiten motorizar las puertas estés o no en casa, hacer fotos, ver lo que está sucediendo fuera, abrir la puerta, poner la alarma, etc.
En conclusión, las tecnologías no van a parar de desarrollarse, lo que es bueno en parte, porque cada vez tendremos a nuestro alcance mejores opciones para protegernos y ganar seguridad, pero por otro lado no sabremos cual es un buen momento para cambiar nuestra cerradura ya que parece que en dos años quedará anticuada. Pero desde aquí te damos un consejo, no te preocupes por eso, las cerraduras es recomendable cambiarlas cada cuatro o cinco años, así que, cuando quieras vas a tener la oportunidad de ponerte al día con las nuevas tecnologías.